En general, casi todos sabemos o "intuimos" que una mente positiva favorece el poder sentirnos físicamente bien. Pero un nuevo estudio de la Universidad de Wisconsin-Madison, va más allá y pretende demostrar que la actividad mental está relacionada con una mejor respuesta inmunológica contra la enfermedad. Los investigadores reunieron un grupo de personas adultas, a los que iban a vacunar contra la gripe, y se les pidió experimentar diversas emociones evocadas voluntariamente: hechos del pasado que les hicieron profundamente felices o profundamente desgraciados, que les causaron miedo o enfado, midiendo el reflejo causado en la actividad cerebral.

Después de las pruebas, fueron vacunados y durante los siguientes seis meses se recogieron pruebas de suero de los individuos en cuestión, para ver el número de anticuerpos contra la gripe que había en la sangre, lo que determina la función inmunológica. El estudio reflejó que las personas con una mente asociada a una emoción positiva tenían una mejor respuesta a la vacuna.